El artículo discute algunos fundamentos de las propuestas de la organización escolar en ciclos y sus implicaciones, a partir de la comprensión de que la propuesta de ciclos necesita agregar un nuevo sentido de escuela al criterio de no reprobación, para afirmar su distinción delante de las propuestas de progresión continuada. Se pregunta: si la escuela debe cambiar, ¿cuáles son los principios que orientan este cambio en la perspectiva de la escuela de ciclos? El entendimiento es el de que el debate sobre estas políticas ni siempre presentan claramente al conjunto de principios que las fundamenta. Se propone, así, una discusión inicial acerca de la pertinencia de aludirse a la psicología como su principal referencia, pasando la cuestión considerada más determinante, que es la comprensión de los sentidos atribuidos a la educación escolar contemporánea, en la que se insiere el embate entre el discurso liberal de la igualdad, con sus variantes actuales en defensa de las diferencias, y el principio de la igualdad sustantiva. Se aborda la tendencia a la redefinición o hasta la supresión del principio de igualdad, lo que se expresa, predominantemente, (1) por la proposición de un "liberalismo igualitario", que tiende a sustituir igualdad por equidad, y (2) por la defensa de un principio de la diversidad como crítica al precepto de la igualdad. En contraposición a estas perspectivas, se destaca la igualdad sustantiva (Mészáros) como un principio orientador general en el enfrentamiento de las desigualdades sociales. El artículo indica, así, la importancia de investigar como las propuestas de los ciclos se sitúan en relación a este embate.
escuela de ciclos; desigualdades sociales; equidad; igualdad sustantiva
